Nota a Cecilia Krill Contesta: La revolución.

 

Una de las más gratas sorpresas del rock mendocino es sin duda Cecilia Krill Contesta, la expresión post-punk que tres músicos del sur de nuestra provincia decidieron dar a conocer en el 2008 con su primer disco. La conversación se dio justamente en Tunuyán, la tierra de los cecilios, tierra de Diego Lobos, Rogelio Lobos y Mauro Mugneco.

Nuestra mayor duda es el orígen de Cecilia Krill Contesta, qué es, acaso un antiheroe.

Si, totalmente. Es una suerte de Che Guevara mujer, esa era la idea en un principio, es más, queríamos hacer una historia detrás, que había participado en

la Revolución Rusa y toda una gran historia, pero varios puristas de la historia se encargaron de decirnos que iba a garpar. Pero habíamos pensado hacer hasta una página web para reforzar nuestra idea. No está demás meterlo apófricamente.
Tiene que ver en la forma que nos paramos para hacer las letras, nos ponemos en un punto medio femenino, medio revolucionario, el de esa mujer que un día se dio cuenta que el mundo le estaba comiendo la cabeza y no sabía que hacer con eso, y las canciones del primer disco tienen mucho de eso: cabeza quemada, la mujer se da cuenta, vamos a empezar con la revolución, letras no muy masculina. Todos tenemos un lado femenino, el costado sensible del hombre.

                                                                                    en vivo en Tunuyán

Está todo muy pensado.

Si. Anteriormente nos pusimos “Lado B”, pero era un nombre bastante pobre, la idea era los lados B de los discos viejos, y de esa forma hacer temas que no fueran “hiteros”, pero no nos gustó, era un nombre muy barrial, no tenía ideología detrás. Porque sin ideología la banda se empieza a romper, no hay un eje temático, estas haciendo música solo por la música y el arte tiene que estar sustentado por las ideas, ya sean políticas, religiosas o contraculturales, pero tienen que tener algo de fondo. Por eso las bandas muy light en ese sentido no me terminen de seducir.
Por ejemplo Babasónicos en un principio venían con una onda “revolucionaria, traemos algo nuevo, vamos a cambiar cabezas” y luego se fue diluyendo, pero a qué apuntan ahora, sólo una cuestión bizarra. Encontraron la fórmula y se estancaron ahí.

No fue nada fácil llegar al disco, no?

No, primero porque al principio cantaba una mujer y se fue. Seis meses antes de grabar teníamos un cantante (Javier Goulú), pero componíamos nosotros. Y cuando nos propusimos grabar el disco se fue de la banda y quedamos medios en bola y no sabíamos que hacer. Buscamos varios cantantes pero por varios motivos no quedó nadie. Venía el disco, ya teníamos las fechas tomados y finalmente Carlos Berguerie me propuso que cantara yo (que solamente había cantado un par de veces en proyectos viejos y más punk). Probamos, me buscó una profesora de canto para pulir algunas cuestiones de respiración y todo eso, me gustó y a los chicos también y quedé.

Y fue lo que le dio identidad a la banda, la voz.

Al principio era jodido tocar y cantar, pero descubrí que podía cantar. Tuvimos un tiempo de ablande después de la edición. Por eso no nos largábamos, si bien el disco lo terminamos en Enero de 2008, recién en Septiembre tomamos como la fecha de salida, que fue en el programa “Zero de Una”, un 8 de Julio, que valga la paradoja fue acústico (ya que en la sala no entraba la batería, por eso decidimos darle a las acústicas), y fue nuestro verdadero arranque.
Se que mi timbre de voz tiene su particularidad, y lo mejor de todo es que yo no me voy a ir de la banda (risas).
Mi objetivo era cantar afinado, pero después le fui encontrado muchas cosas positivas. Además con Mauro (Mugneco) también se descubrió como corista, trabamos de hacer entre los dos una sola voz, pero después empezó a meter coros en terceras y quintas y quedamos los tres sorprendidos, también fue un grato descubrimiento.

                                                                                Mauro, Diego y Rogelio

Frente a todo esto ¿el disco cómo iba?

Teníamos muchas canciones (más de cuarenta), hicimos una preselección y quedaron veinticinco, luego se las llevamos a Carlos y de ahí quedaron las doce que tiene el disco. Previamente habíamos hecho un demo casero, pero después la idea era mostrar lo que era la banda en ese momento, que eran las que más le gustaban a la gente y sobre el final del disco las que más nos gustaban a nosotros, que eran más oscuras, quedando justamente un Lado A y otro B. Uno más arriba, y otro más oscuro y bizarro, como por ejemplo “Vendaval” es uno de los más oscuros del disco.
En cuanto a el arte del disco, yo soy muy fan del cómic y del animé, así que buscamos a Emiliano Dalmau, un artista de Tunuyán que trabaja mucho el arte digital, y le hicimos escuchar el disco muchas veces y le pedimos algo de cómic que tuviera que ver con la revolución, en conjunto con algo retro. Y salió la tapa de la cara, adentro el bosque con el tipo que representara la soledad. En un principio ahí iban a estar las letras, pero a último momento decidimos que no.


¿Cómo decidieron editarlo?

Nos dimos cuenta que el tema del soporte ya no existe, es un fetiche de los coleccionistas que nos gusta tener el CD, vos le pasa el disco a un pibe y no le dan bola. Igual es un arma de doble filo, porque tampoco los pibes se meten a la página y se bajan el disco.
El primer paso, lo subimos a la web, y empezamos a darle rosca para que la gente se lo bajara (tenemos un contador que nos marca mas de mil descargas).
Sin embargo no queríamos que a la hora de editarlo fuera como uno grabable. Nos pusimos en contacto con el MIMM y realmente se nos abarataron los costos.

Después tuvimos la posibilidad de lanzarlo con la revista Zero que nos sirvió, y nos dimos cuenta en los recitales siguientes la gente se sabía los temas, y fue un flash. Después tuvimos otras satisfacciones como ser parte de un compilado de Stay Free (My Generation). Quedar preseleccionados, junto a 9 bandas de todo el país, para participar en el concurso iberoamericano U-Rock. Aparecer en la revista La Mano como una de las 10 bandas más escuchadas en el portal Sónica. Ser ternados para los Premios Escenario , y otra locura fue ver que un blog de La Plata (Rock Under) nos eligió como el “disco del año 2009” (más allá que sea del 2008).

Para mi las canciones una vez que se editan dejan de ser tuyas, porque esas canciones van a funcionar el día que en el cerebro de otra persona hizo un click.

continuará....